Las dos partes han decidido dar continuidad a sus negociaciones y reencontrarse en marzo en el complejo Greentree, en Manhasset, a las afueras de Nueva York, que ha sido escenario de las tres rondas de negociaciones que se han celebrado desde que comenzó el actual proceso de diálogo, en junio de 2007.
Parece ser que ése es el único avance logrado tras tres días de negociaciones, de las que ha salido un comunicado conjunto en el que se asegura que las partes han sido capaces de acordar "medidas para aumentar al confianza mutua".
Sin embargo, sí se han mantenido "negociaciones preliminares sobre asuntos como la administración, las competencias o los órganos", asegura el comunicado difundido por el enviado especial de la ONU para el Sahara, Peter van Walsum, al término de la reunión.
"Las partes han seguido expresando sus fuertes divergencias respecto a las cuestiones fundamentales que hay en juego, aunque reafirman su compromiso de mostrar voluntad política y espíritu negociador de buena fe, tal y como pedía el Consejo de Seguridad", añade el texto.
Ambas partes también están "convencidas de la necesidad de hacer que el proceso negociador entre en una fase más intensa y sustantiva", apunta el comunicado.
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